Esta vez tratará sobre Tote
Col, aquel niño que vimos anteriormente, sobre su pasado y sobre su posible
futuro. Y también veremos a un Lawrence demostrando lo que la vida como
comerciante le ha enseñado.
Un trenni y ocho lutes. Ese
fue el precio que Col pagó por un montón de papeles. Entre ellos, estaba el que
sostenía mostrándoselo al guardia. Lawrence ofrece 10 lutes, pero finalmente
ofrece 20 y se los compra. Col le describe como era el hombre que le vendió
aquellos papeles. Un hombre que le falta el brazo derecho. Un ladrón que roba dinero,
pierde un dedo; un estafador que roba la confianza, pierde un brazo. Por piedad
de Ragusa, el muchacho podía viajar sin pagar su pasaje.
Tras prestar su ayuda a manera
de pago, Col regresa al barco al partir del puesto de control. Una vez allí, Lawrence
le muestra algunos de los papeles que le había vendido Col. En una de ellas
mostraba sobre una tal empresa que estaba comprando dinero, estaba comprando
monedas de cobre. “[…] ¿Por qué comprarías dinero de todas las cosas?” preguntó
Holo. Sin duda, una buena pregunta que el buen Lawrence se dignó a responder.
Otro papel indicaba sobre cierta empresa Jean, papel registrado a nombre de Ted
Reynolds. Este papel parecía ser un registro de la mercancía trasportada en una
nave, fechada hace un año. El destino era más allá del canal de Kerube, rio
abajo. El reino de Winfield era el destino, siendo también el hogar de Eve. Este
registro contaba diversos objetos, como cera, botellas de cristal, libros,
hebillas, placas de hierro, orfebrerías y … ¿Eni? El eni era un tipo de moneda de cobre usada
justamente a lo largo de todo el reino de Winfield. Por petición de Holo,
Lawrence comparó ambos papeles encontrando una coincidencia. La compañía era la
misma, pero con dos meses de diferencia. En una de ellas indicaba la compra de
monedas de cobre, y en la otra, el envío de estas. Pero había una diferencia. Había
tres cofres sobrantes que, a simple vista, no estaban relacionadas con el envío
de dinero. Para Holo y Col, no tendría mucha importancia, pero para Lawrence,
algo no cuadraba. Él explico que estos cofres estás relacionados con el conteo
de todas las monedas que aquella compañía había comprado. ¿Qué tiene que ver
los cofres con contar monedas? Nuevamente, vemos a un Lawrence confiado en su
experiencia como comerciante capaz de explicar tal situación.
Si quieren saber porqué el rostro de Lawrence está así, pregúntenle a Holo.
Justo cuando Col se empezaba a
mostrar más abierto, un trauma le impide seguir así. Col era un ex estudiante. Él
quería estudiar derecho canónico. Normalmente los que estudiaban eran de
familias ricas o porque no querían heredar el negocio familiar. Encontrar a
alguien que quiera estudiar por voluntad propia era muy raro. Col provenía de
la escuela Aquent, una escuela que estaba sumamente lejos de donde ellos
estaban actualmente. Debido a ciertas circunstancias, Col no pudo seguir
pagando su escuela. También había sido estafado mucho antes de manera que no
pudo pagar y no le quedó otra que escapar. Tras diversos giros del destino,
terminó con ellos.
Sin duda, una buena historia.
El autor nos sorprende con pequeñas cosas que, para nosotros, los humanos
mortales, no están relacionadas; pero para Lawrence, todo tiene relación con lo
demás. He colocado detalles que me han parecido interesantes y probablemente
más adelante sean útiles… o quizá no. Personajes nuevos con características únicas
y personales. Quizá una que otra cosa en común, pero algo normal que nos
muestran que tienen sentimientos humanos. Detalles que uno se da cuenta al leer
la obra. Nunca viene mal leer una obra de vez en cuando, así nos culturizamos. ¿No dicen que leer un libro es mejor que mirar la TV?